METALLICA – METALLICA (1991)

 



Treinta años de éxito tenaz, pero también de polémica perdurable. Para cuando el álbum homónimo de Metallica llegó a los anaqueles de las tiendas de discos de todo el mundo, ya poseían una base de fanáticos ansiosa de poseer el nuevo material. Las filas se contaban kilométricas y las ventas resultaron arrasadoras, el triunfo estaba predestinado. 12 de agosto de 1991, fecha que permanecerá bien remarcada en la consciencia de un colectivo de admiradores que encontraron una causa por seguir, un motivo para continuar respirando y por otro lado, por supuesto, una facción importante de seguidores de hueso colorado a quienes la “mutación” en el sonido resultó un acto de traición: los reyes del Thrash se habían vendido a la gran corporación, teniendo que modificar el atronador rugido de sus cuatro placas anteriores, ante un diligente murmullo apenas con el suficiente empeño para mover ligeramente la cabeza. Pero claro, también hubo un tercer contexto, las motivaciones de la banda misma.

Disponsable Heroes 1991!


Los ochenta fueron un batallar constante, la cuesta que luce imposible de montar, sin embargo, como en cualquier historia cuyo eje se guía a través de la metodología establecida por el erudito Joseph Campbell, en el camino se hayan obstáculos que al ser superados uno a uno, la enseñanza modifica para bien toda templanza del personaje principal, osease del héroe, en este caso, una esencia dividida en tres protagonistas: James Hetfield, Lars Ulrich y Kirk Hammett sorteando la perdida y el duro camino. Con Jason Newsted  al filo del cañón, el cuarteto de San Francisco venía de una estupenda gira que prácticamente los consagraba encima del podio de las mejores agrupaciones de metal: veloces, enérgicos, armados con canciones poderosas de contenido significativo, sus habilidades no se limitaban a un instinto brutal, sino avanzaron hacia una progresión mucho más compleja. Fue cuando apareció Bob Rock.

Rostros de una promoción contundente

Cargando un currículo de producción, para nada malo, que incluía a Aerosmith, The Cult y los muy de moda Mötley Crüe, Rock consiguió convencer a Metallica de posicionarlo tras la consola para su próximo trabajo discográfico, y aunque al principio dudosos, aceptaron emprender una nueva etapa, aun cuando le hicieron ver su suerte al productor. El resultado lo conocemos, una vasta anécdota de aprendizaje con equipo digital y moderno, mejores instalaciones y un adelanto monetario cuantioso por parte de Elektra, su disquera. La dulzura de la miel comenzaba a manifestar su brillo excedente, sin embargo, lo mejor estaba por llegar.

Hubo una transformación, sí, eso nadie puede dudarlo, la agrupación se desarrolló dentro del círculo casi underground que se movía por las rutas trazadas por bandas de punk y college rock, entre las que podemos enlistar a celebridades contraculturales como Black Flag, Hüsker Dü y R.E.M., el mapeo fue aprovechado e imitado por un amplio sector bien instalado en el Thrash, Crossover, Speed y Death Metal, cosa que Bob Rock intentó eliminar para brindarles una esencia destilada y tradicional del rock de estadio, partiendo de la espectacularidad escénica de Kiss a la banalidad obtusa de Poison, Ratt y Bon Jovi; que si bien no lo logró del todo, el impacto dio de lleno en su sonido: adiós velocidad extremada, rapacidad filosa como piedra marina y conceptos mitológicos inteligibles en las letras.

Sin embargo y tal como Lou Reed para Loaded de los Velvet Underground, Metallica supo mover sus piezas, manteniéndose cercanos a ciertas reglas de identidad, como sus letras profundas de conflictos personales, impregnadas con cierto imaginario fantástico a la par de la sagacidad de riffs potenciados y solos que desgarran el corazón. Así mismo, su “Álbum Negro” aludido así por su portada nebulosa que impacientemente oculta el nombre del grupo y la figura enrollada de una serpiente, toma homenaje del “Álbum Blanco” de los Beatles, en una conjugación semántica de colorimetría, conceptos gráficos y música avasalladora.


Una banda entre sombras


Hail the lord of dreams & nightmares!

Enter Sandman simplifica su sonido e intenciones con melodías inmediatas, sin bajar la guarda con su aplastante rítmica y una visible oportunidad de alcanzar nuevos campos comerciales. De estribillos inolvidables, su letra apostilla a un ser enigmático que vive y se apropia de la materia de los sueños. Sad But True golpea con la potencia del trueno, lenta y contundente, es un retrato oscuro de histeria y mutismo de personalidad. Colmada de riffs ultra pesados que viran de lo discretamente progresivo a lo enérgico, el solo de guitarra es muestra fiable de la calidad melódica de sus arreglos. Holier Than Thou es un ataque agresivo de bajo superpoderoso (auténtica venganza de Jason Newsted) acompañado con riffs mordaces que desbaratan la yugular en segundos. La pieza resulta impetuosa, con una dinámica que se desliza cómodamente hacia un sendero más accesible pero no despojado de violencia. 


Triste... pero cierto!

The Unforgiven es uno de los momentos altos de la placa, primer balada en esta, es un verdadero festín de melodías vestidas con guitarras acústicas, exacerbando el eje dramático hacia un punto de fastuosa tensión. El solo, la letra (el eterno conflicto del ser) y el trabajo vocal de Hetfield la convierten en un deleite supremo. Wherever I May Roam es otro épico canto de supervivencia en la carretera, construida a partir de una estructura más básica de riffs repetitivos, su velocidad y pesadez, aunque abismales, detonan una afable accesibilidad gracias a su producción y mezcla pulidas. Don´t Tread On Me encuentra su motivo en el heavy rock y una de tantas idiosincrasias gringas, inclinadas hacia el libertarismo, invitando a luchar por respeto en un contexto adusto. 


The Unforgiven live in San Diego ´92


Through The Never acompasa su sección rítmica en favor del lustre arreglo guitarrístico, sin que uno desluzca el otro, hilvanando un sorteo de impetuosos cambios a la par de centrífugos solos y machacantes riffs. Nothing Else Matters es la segunda balada del plato, reconocible de inmediato por el efecto de chorus en sus guitarras. Una canción de amor en regla, adaptable a una situación (de supervivencia, claro) o a una persona. ¿Qué la hace funcionar tan bien? El arreglo progresivo de Hammett, su sección de cuerdas que inyectan color y el aire épico que ineludiblemente forja. Of Wolf And Man es un potente fulgor en medio de la oscuridad: pesado, directo, injustamente olvidado, de rítmica galopante y riffs machacantes; entre lo mejor de todo el disco. 


de lobo a hombre... en vivo en México!

The God That Failed es otra joya de arreglos intrincados donde convergen riffs contundentes y la percusión combativa de Ulrich, estamos frente un reclamo existencial donde se contraponen la fe y el dolor. My Friend Of Misery resalta las cualidades melódicas de cada miembro de la banda en su respectivo elemento, gran trabajo de guitarras, divergencia vocal y sección rítmica sobresaliente. The Struggle Within urge en su crónica de percusiones militares, empujando la instrumentación de vuelta al heavy rock, revelando una intención comercial consolidándose a través de su sonido pulido.


A donde quiera que vayas...!

Metallica, el álbum, sirvió para fundamentar un antes y después para el metal, ayudando a referenciar una escena que antes permanecía en la sombra, aunque también trajo un amplio lapso de desarraigo no sólo para sus autores, sino para muchos de sus contemporáneos durante los años noventa.



Tracklist:

1.- Enter Sandman

2.- Sad But True

3.- Holier Than Thou

4.- The Unforgiven

5.- Wherever I May Roam

6.- Don´t Tread On Me

7.- Through The Never

8.- Nothing Else Matters

9.- Of Wolf And Man

10.- The God That Failed

11.- My Friend Of Misery

12.- The Struggle Within


Álbum completo en 👉 YouTube Spotify

Comentarios

  1. Siempre nos preguntamos ¿Qué sería de Metallica si hubiese continuado con la misma línea de sus 4 primeros discos? Creo que lo que nos queda es aceptar que evolucionaron y para nada fue de una mala forma, Metallica es un gran disco que hay que escuchar con apertura y sin duda se disfruta cada una de sus canciones

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