MUSE – ORIGIN OF SYMMETRY (2001)

 



Seguido de un debut sorprendente que cimentó una firme base de fans alrededor del mundo, Muse regresó al ataque con el movimiento más lógico: un cumulo de nuevas canciones de sonido espacial, ancho en ritmos contundentes y melodías exacerbadas.  

La agrupación inglesa comandada por Matt Bellamy en voz principal, guitarras, piano y sintetizadores, además de Chris Wolstenhome en el bajo y el baterista Dominic Howard, tardó alrededor de dos años en lanzar nuevo material, tratando de desprenderse de las obvias comparaciones que distintos medios y algunos escuchas, realizaban de una de sus principales influencias: Radiohead.

Y, ¿A caso lograron tal cometido? La respuesta es un no irreductible. Sin embargo, tampoco significó un retroceso o fallo catastrófico, sino lo contrario. Fomentaron un sendero propio en el cual y desde entonces, continúan esculpiendo y perfeccionando su personalidad musical. Este sonido casi magnificente, conjugado a sus letras de carácter épico y contenido socio/político han garantizado en cada nueva entrega, la formidable calidad de su trabajo.

Jóvenes y no tal joviales

Trayendo a cuestas un concepto de imaginería colosal, las grabaciones de este Origen de la Simetría, ocurrieron entre septiembre del 2000 y febrero de 2001, colindando con la pretensiosa idea de “americanizar” su sonido, impregnando algo de la cruda energía de Rage Against the Machine, Nirvana y Smashing Pumpkins, todo, en una amalgama de voces temerarias, arreglos elegantes e instrumentación de corte progresivo. De aquella intención de adoptar cualidades más inclementes, sólo los riffs con toneladas de distorsión sobrevivieron.

Más cercanos que nunca al rock progresivo, Muse sacudió la cresta de las olas con furia y sofisticación al unísono. Gracias a las cualidades dramáticas en el canto de Bellamy, todas las canciones contuvieron un importante nivel intimidad, impactando favorablemente desde su primera escucha.

Dígase en plena acción

Como olvidar la mini ópera espacial de excéntrica epicidad con la que abre el plato: New Born es un amasijo de teclados virtuosos, bajo profundo y llano, un derroche a plenitud de característico falsete y poderosos riffs metálicos, a la que se une la marcha imponente de batería contrastando su luminosidad a la de las estrellas en el espacio profundo. 


El segundo corte, Bliss resulta otro gol instantáneo. Abriendo con sintetizadores acuáticos que moldean progresivamente la canción de principio a fin, dan partida a un descomunal embate rítmico que enlaza su potente guitarra, en tanto la voz acrecienta en economía melódica y emotiva. 


Space Dementia desemboca una paranoica factura sinfónica de vocales melindrosas, notas gigantes de piano que intercalan pasajes electrónicos y brillantes dosis de distorsión, económicamente en cada uno de los arreglos que resuenan excelsos. La letra relata un viaje de consecuencias inquietantes para una tropa de viajeros espaciales que ya no cuentan a cabalidad, con sus facultades mentales. Hyper Music despierta con desafinado ímpetu punk, resultando una seca agresión de riffs congestionados de heavy metal, bajo funk y percusiones temerarias. El placer musical de conjugar pasajes desvestidos de complejidad, mediante la sola satisfacción de incluir un momento de caos desatado.



Inmediatamente nos adentramos al primer sencillo del álbum, sin ser para menos, uno de los cortes más afamados de la banda: Plug in Baby se desenlaza épica, directa y gigante; con su guitarra filosa, batería iracunda y el bajeo saltarín que semeja un resorte colmado de distorsión, en donde los estribillos destilan desesperación, sus arreglos se vuelven netamente memorables. 


En Citizen Erased la sección rítmica golpea maciza, solicitando prestada una tonelada de agresividad del Nü-metal, la guitarra revive en hilos de aguda distorsión, una cama de teclados de arreglos progresivos, enfatizando en toda su merecida y larga complejidad. Micro Cuts pareciera conformar el soundtrack de una épica espacial: atmósferas opresivas que descargan la falsete machacante de un Bellamy virtuoso. Las guitarras confluyen en apurada armonía con la sección rítmica, desplegándose en un arrebato contundente que se adereza con puntillosos teclados. 



Screenager es un conflictivo instante de calma, seduciendo con sus arreglos acústicos de repercusión lo fi. Resulta imposible no pensar en Jeff Buckley, otra importante influencia de la banda, exorcizando el fantasma del malogrado cantautor, en un impresionante esfuerzo místico e hipnótico.



Darkshines conserva la calma con sus versos que se someten a una esencia de medio oriente, guitarras de western enigmáticas que parten el ritmo acompasado; explotando en un debraye irascible y portentoso, que se atavía con gritos monolíticos. Feeling Good es un blues luminoso, original de Leslie Bricusse y Anthony Newley, que obtiene un arreglo moderno de guitarras pesadas, y una sección rítmica exquisita que ensalza con teclados de discreta tesitura. 


La concluyente 
Megalomania es un cause atmosférico de rock barroco, echando mano de un opresivo mellotrón que espera delicadamente atacar con gran magnitud por medio de un órgano de catedral magnificente. Creo que, a partir de esta pieza, espacial y densa, Muse atrajo para sí, una esencia de Queen y Freddie Mercury, de la que también tardarían en desprenderse, sin que precisara algo necesariamente equivoco.

Bonus Track: Futurism incluida originalmente para la edición japonesa, engloba casi a la perfección la marca general del álbum: guitarras furiosas, bajeo animado, voces grandilocuentes y batería impostada; añadiendo teclados espaciales que la transforman en un torbellino de melodías y distorsión heroica.

Origin of Symmetry fue lanzado el 18 de junio de 2001, celebrando próximamente su vigésimo aniversario. El tórrido segundo plato de Muse desembocó en un paso que los impulsaría dentro de la élite del rock, tras un viaje donde la esencia sinfónica, la psicodelia avanzada en progresivo, y la herencia grunge cruzaron caminos, volviendo este álbum una escucha necesaria y enriquecedora.  



Tracklist:

1.- New Born

2.- Bliss

3.- Space Dementia 

4.- Hyper Music

5.- Plug in Baby

6.- Citizen Erased 

7.- Micro Cuts

8.- Screenager

9.- Dark Shines

10.- Feeling Good

11.- Megalomania

Álbum completo en YouTube y Spotify 💥

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