U2 – BOY (1980)

 


Sin temor a equivocarme, el álbum debut de U2 es, cuando menos, una experiencia canónica. A cuarenta años de su publicación, el 20 de octubre de 1980, el plato pasó de ser un despertar inocente a una valerosa incursión y casi mítica, hacia el mundo de la madurez abatida.

Es real, si señalamos la despedida de la adolescencia, como un sentimiento a toda piel, cruzando por el umbral de lo desconocido, hacia un cumulo de promesas que están a punto de llegar. Y es justo, cuando los miembros de la agrupación se encontraban en ese contexto: con apenas 19 y 20 años, Bono (David Hewson, de nacimiento), The Edge (alias David Evans), Adam Clayton y Larry Mullen Jr., convergieron cuatro años antes, cuando los primeros berridos del punk se hacían sonar, haciendo música por su cuenta. Partidarios de ese impulso rebelde llamado DIY (hazlo tú mismo) y de una fe Cristiana simultánea, la resonancia de estos chicos irlandeses se manifestó en grandes proporciones, aunque no se esperaba mucho de ellos.

a punto de dejar atrás "los dolores de crecimiento"

Armados de una decena de recursos musicales (aun cuando ninguno tenía como tal una formación de conservatorio), su carpeta sónica se basó, no sólo en el punk rock (Sex Pistols, Ramones, The Damned) sino fraguó directamente de la escena Post, en donde podemos catalogarlos, por lo menos en este primer opus, Boy.

Decididos a avanzar con paso firme por el mismo sendero que los recién desaparecidos Joy Division, y tomando prestadas las cicatrices góticas de The Cure, Bauhaus, Siouxie and the Banshees, Televisión y hasta de los Psychedelic Furs; los resultados de la fórmula eran imposibles de fallar. Ya en el estudio y gracias a la buena mano de Steve Lillywhite tras la consola de producción, las grabaciones tomaron de julio a septiembre de 1979.

despegando un futuro de triunfos

El plato inicia con la implacable I Will Follow, un galope inmediato tanto en la sección rítmica y gigantesca de guitarra de riffs vertiginosos a la Zeppelin, con esa impronta característica de la juventud y el Post Punk. Aunque luminosa e interpretada por Bono como un himno de hard rock, la letra manifiesta una búsqueda desesperada: un paralelismo por el apego religioso de la agrupación y una diáfana dedicatoria para la madre de Bono

yo te seguiré...

El brío continua con Twilight, un manifiesto de madurez infranqueable en letra y música: bajo hondo, batería contundente y consistente guitarra, fungiendo como una estela luminosa reventando en el ocaso. Bono se desgarra interpretando una crisis existencial, proveniente de la mencionada transición de la adolescencia a la adultez.

Crepúsculo

An Cat Dubh desprende una vena gótica y atmósfera ominosa, siendo la guitarra de The Edge la navaja filosa que entreteje diversas capas de sonido, Adam Clayton realiza un trabajo monstruoso en el bajo y Larry Mullen golpea con percusiones dignas del fin del mundo. La letra de Bono, relata otro tipo de despertar, el sexual, a través de una fábula extraña de un ser sobrenatural: una especie de mujer gato sombría. Esta pieza se conecta directamente, con la breve y calma Into The Heart reposando serenamente con los rasgueos intermitentes de bajo y guitarra luminosa; su letra aborda el tema de la nostalgia como efecto del paso del tiempo. Out of Control es explosiva, cosa que se augura con su inicio casi melancólico, dando paso al galope conjunto de la guitarra, incluyendo potentes solos, batería y bajo, casi eminentes, influencia directa de Joy Division. La letra toca el tema de la mortalidad, como una instancia pasajera, a lo cual hay que aprovechar cada instante y vivir de forma alocada. Otro factor distintivo, es el buen manejo de Bono con su voz, vivaz y grandiosa. 

Fuera de control... en vivo

Stories For Boys es un tema bien conocido por los primeros fanáticos de U2. Pieza clásica y clave en su historia, muestra irreductible de la buena factura en su música, si bien, todavía muy evidente, promete alcanzar mejores proporciones gracias a su juvenil energía. Nuevamente, los instrumentos se despliegan decisivos, destacando las vocalizaciones de The Edge justo detrás de Bono, acentuando el dramatismo a la par con la batería de Muller Jr., que no descansa.

Historias para muchachos... en vivo

TheOcean es otro ejercicio de serenidad, dramático y misterioso. Impera la sección rítmica, ensalzando una especie de densidad nebulosa, en tanto la guitarra recrea una efervescencia contigua en la atmósfera en claroscuro. A Day Without Me es una pieza volátil, dedicada a Ian Curtis. Por obvias razones, la letra acentúa el tema del suicidio, como una especie de reivindicación calamitosa de la juventud, en su derrota y rebeldía. La pieza contrasta, en su esencia luminosa y grande, como un rock sencillo y directo, gracias a los contrapuntos de su batería y guitarra de riffs expansivos. The Edge hace gala de vocalizaciones corales que destacan esa atmósfera de confusión y solemnidad. 

Un día sin mi... en vivo

Another Time Another Place inicia con punteos intricados de guitarra, tomando cuerpo con el bajo y batería militantes, el corte se acerca fuertemente al rock duro de la década por venir. El eco característico en las cuerdas de Edge, aunque breve, resulta un susurro elegante que desarrollaría con mejor amplitud en siguientes entregas. The Electric Co. es otro desplante enérgico, mediando una línea convincente, musical y lírica. Extraña cuando menos, fluye acelerada y vigorosa, gracias a la sección rítmica de Mullen Jr., y Clayton, en tanto las diversas capas de guitarras, melódicas y disonantes, alimentan el color en la voz de Bono, transformando el tema en un excelente centellazo eléctrico.

La Compañía eléctrica... en vivo

Shadows and Tall Trees adquiere su nombre en la literatura distópica de El Señor de las Moscas de William Golding. Aun con la inocencia feneciendo levemente, la guitarra gótica de Edge y sus coros, sacan brillo en tanto los compases de la batería delatan una gran composición detrás, enlazándose simbólicamente con el bajo. Bono luce todo vigor de su diafragma, en este temazo conclusivo.  

Boy transmite las facciones de un rostro que destila optimismo, a pesar de encontrarse inmerso en los peligros de un mundo adulto. Encontrándose directamente materializado en su portada, donde el niño Peter Rowen sirvió como modelo, destilando en su mirada un juicio silencioso hacia el escucha, con toda las intenciones conceptuales y musicales de la agrupación.


Tracklist:

1.- I Will Follow

2.- Twilight

3.- An Cat Dubh

4.- Into The Heart

5.- Out Of Control

6.- Stories For Boys 

7.- The Ocean

8.- A Day Without Me

9.- Another Time Another Place

10.- The Electric Co.

11.- Shadows And Tall Trees 

Álbum completo en YouTube y Spotify 

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