TEARS FOR FEARS – THE TIPPING POINT (2022)
Los años que conformaron la década de los ochenta fueron, sin duda, fuente laudable de excelente entretenimiento, un momento en la historia donde la música representó ese punto álgido de inspiración acomedida, talento nato (aunque esta moneda también poseía su lado superficial), ofreciendo al gran público obras musicales inolvidables y que, cuarenta años después continúan emulándose con un empeño casi desmedido. Durante este tiempo, los avances en la electrónica que iniciaron en los sesenta, fluyendo prodigiosamente durante los setenta, aterrizaron en una especie de formulación que la industria aprovechó para darle impulso a una camada de nuevas estrellitas acarameladas de poca monta que gozaron de éxito, en su mayoría efímero, mientras que otras, mediante un golpe de suerte (o talento e inteligencia real), sobrevivieron a pesar de la velocidad con la que los medios y MTV desechaban a sus nuevos modelos a seguir en las listas principales. Sin embargo, de entre la marabunta sint...